HOMENAJE A BERNARDO O’HIGGINS, AGOSTO
23 DE 2014
Chillán
viejo, un 20 de agosto de 1778 nace quien sería considerado en la historia de
nuestra Patria como su Padre. La paternidad de don Ambrosio O’Higgins le
permitiría seguir estudios en Lima y, luego, en Inglaterra A la muerte de su
progenitor, volverá a Chile iniciándose, nueve años después, una brillante
carrera, primero, como Diputado y, más tarde, como militar.
Su aporte a
la naciente nación es inmensurable. La lucha contra los invasores realistas, la
organización del Ejército Libertador de Los Andes, junto a José de San Martín,
su rol como Director Supremo y la Proclamación de la Independencia de Chile son
hitos de enorme trascendencia para nuestra historia y deben ocupar un lugar
privilegiado en la formación de nuestros niños y jóvenes ya que en ello se
fundamentan los más sólidos cimientos de la nacionalidad.
Pero es
necesario destacar también otros legados del prócer que, muchas veces, la
población desconoce. Fue un visionario al poner el acento de su gestión en la
construcción de Escuelas Primarias. La reapertura del Instituto Nacional y la
Biblioteca Nacional constituye un afán por generar cultura en la naciente
nación.
El 16 de marzo
de 1817, da vida a la Escuela Militar que hoy lleva su nombre y que se
constituirá en uno de los institutos más importantes de nuestra América en la formación de los oficiales del Ejército
de Chile. Desde esta Escuela Militar se irían forjando las futuras ramas de las
Fuerzas Armadas.
Desde el
pequeño niño de Chillán Viejo hasta el valiente hombre de armas, estadista y
libertador, hay toda una intrahistora que va perfilando al prócer que hoy
homenajeamos. El Liceo Tecnológico Alfredo Nazar Feres, en sus 129 años de
existencia, y los establecimientos que veremos desfilar ante el prócer en esta
mañana, hemos querido valorar en su justa dimensión al hombre y militar que
forjó con su vida la Patria en la que hoy vivimos nuestra propia intrahistoria.
Muchas
gracias.
Luis R.
Pereira Vásquez, Director